La profesión de Silvia comienza a ser vox pópuli en el barrio y a Marcelino le preocupa que la mujer monte un burdel en el piso que le ha alquilado Quintero. La mujer además, agradece la buena fe del abogado e intenta pagarle una parte del alquiler, pero Quintero tiene una solución mejor, le ofrece trabajo como secretaria en el bufete.
Álvaro y Carolina están entusiasmados con su recién estrenada revista… y relación. Y sobre el primer asunto tendrá que vérselas con Jesús, que lo acusa de haber plagiado uno de sus chistes en el primer número de “Hasta luego”.
Gabriel está dispuesto a demostrar que Natalia no es la culpable de los robos que se han llevado a cabo en el hotel y para ello, piensa denunciar el caso a la policía. Natalia entra en pánico pues ello supondría revelar su verdadera identidad…
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