martes, octubre 3, 2023
La casa de papel

La casa de papel

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Personajes de ‘La casa de papel’

El profesor (Álvaro Morte)

Inteligente, tímido, introvertido y con pocas dotes sociales. Tuvo una enfermedad cuando era pequeño y se dedicó a estudiar. Es curioso y autodidacta. Perfeccionista, detallista y muy ambicioso en sus planes. Tiene muy presente a su padre, que murió atracando el Banco Hispanoamericano, y a su hermano Andrés (Berlín) que murió en el atraco a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre. Le relaja hacer figuras de origami y solo disfruta cuando tiene todo bajo control.

Raquel Murillo – Lisboa (Itziar Ituño)

Fuerte y apasionada. Su tenacidad y astucia hicieron de ella una gran inspectora de policía. Su empatía, inteligencia y calma la convirtieron en la negociadora ideal. Aunque ahora está en el otro bando y se hace llamar Lisboa. En lugar de enfrentarse a la clásica crisis de los 40, Murillo ha tenido que rehacerse a sí misma y asumir que ha sido demasiado tiempo víctima de malos tratos, una experiencia dolorosa de la que ha resurgido convertida en la líder nata que jamás volverá a dejar que nadie la pisotee.

Denver (Jaime Lorente)

Vitalista, cariñoso e hiperactivo. Pero también marrullero, llegado el caso, lo que no quita para que sea de fondo noble. En el atraco a la Fábrica de Moneda y Timbre se enamoró de Mónica Gaztambide y sigue tocado por la muerte de su padre. Tiene un inexplorado sentido de la responsabilidad y del deber, aunque luego su inexperiencia o su torpeza hagan que las cosas no salgan como pensaba. De origen humilde, con cero estudios, le gustan la fiesta, las birras y la compañía de los suyos.

Estocolmo (Esther Acebo)

Mónica Gaztambide, alias Estocolmo, ha pasado de ser secretaria de la FNMT a ser una más de la banda. Inteligente y cabezota, pero también insegura a veces, lo que le llevó a tener relaciones sentimentales tóxicas con exparejas que la manejaban a su antojo, como el cretino de Arturo, el padre de su hijo. Con su melena rubia y rizada cualquiera diría que Estocolmo ha nacido para llamar la atención, y, sin embargo, su mayor virtud siempre fue pasar desapercibida. Su nueva estabilidad, la ternura, el cariño y la admiración que Denver siente hacia ella, han hecho que ahora sea una mujer más confiada, valiente y con ganas de demostrarse a sí misma de lo que es capaz.

Tokio (Úrsula Corberó)

Mujer 10, parece sacada de un videojuego. Siempre seductora, es una montaña rusa, tiene un carácter inestable con cambios drásticos de estado de ánimo. Es un torbellino, luchadora, salvaje, siempre en busca de nuevas emociones y experiencias con las que huir del aburrimiento. Tiene una relación sentimental con Río, que le despierta su lado más vulnerable. Confía plenamente en la inteligencia y saber hacer del Profesor. A pesar de sus cambios, es fiel y honesta con sus amigos, como Nairobi, con la que tiene una relación de amistad sin fisuras.

Río (Miguel Herrán)

Veintipocos, atractivo, deportista, cara de niño bueno y una sonrisa que desarma. Criado en una familia normal, Río nunca ha tenido motivo para desconfiar de las personas y por eso su actitud siempre es positiva y luminosa. Amante de los videojuegos, este cerebrito de la informática es un chico noble y sencillo convertido en hacker internacional. Romántico, fiel, su talón de Aquiles se llama Tokio, la mujer inestable por quien este imprudente enamorado sería capaz de arriesgarlo todo.

Nairobi (Alba Flores)

Alegre, divertida y práctica. Una persona que te anima y soluciona cualquier situación difícil. Trabajadora y perfeccionista, es la persona que aporta estabilidad al grupo. Siempre intenta pensar en aquello que es más eficaz para que el plan salga bien. Incluso si eso implica aplacar sus emociones. Tiene sus objetivos y prioridades muy claros y, si tiene que enfrentarse a alguien, lo hace para impedir riesgo alguno en el plan. A raíz del atraco a la FNMT, tiene una relación de amistad y admiración por Helsinki. Es fuerte, aunque a veces se culpe por no poder encargarse de su hijo, y no puede evitar que le salga su lado maternal con los más débiles.

Helsinki (Darko Peric)

Enorme, fuerte como un oso. Este exmilitar de los Balcanes combina su corpulencia física y su determinación con un corazón de oro. Cariñoso y protector con las pocas personas a quien deja entrar en su zona de confianza, los cuales pasan inmediatamente a formar parte de su familia. Criado en un mundo de hombres soldados, Helsinki está acostumbrado a ejecutar órdenes violentas sin cuestionarlas.

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Notas del creador

Si aún no has visto La Casa de Papel, no sabes de qué va, lo básico es que sepas que narra un atraco planeado por una mente privilegiada. Es un policiaco, un asalto con rehenes, un secuestro, es una historia de amor, de amistad, de afectividad. Es entretenimiento puro y duro, comedia y humor negro, con personajes adictivos, inquietantes, descarados, excesivos, donde los buenos no lo son tanto y los malos tienen una cara b.

Cuando La Casa de Papel comenzó a convertirse en un éxito internacional gracias a Netflix, para mí, para todo el equipo de Vancouver Media, la historia había terminado. Con el lanzamiento en la plataforma, sin publicidad ni campañas, fuimos descubriendo cómo empezaba a ser la serie más maratoneada, nos llegaban imágenes de tifos en Arabia Saudí, miles de personas disfrazadas por carnaval en América Latina, la amenaza de prohibición polémica en Turquía, tatuajes de Tokio o El Profesor en los fans. La pasión que despertaba en media Europa nos pilló desprevenidos. Así es que, cuando desde Netflix nos animaron a coger de nuevo las riendas de estos personajes, tardé mucho en aceptar. Se trataba de una ficción planteada para una sola temporada, partida en dos, con un inicio y un final claros. ¿Por qué iba unirse de nuevo la banda?

Tardé varios meses en encontrar la respuesta. La responsabilidad de no decepcionar a todas esas personas entusiasmadas con la banda, nos obligaba a un desarrollo que cumpliera con las expectativas de todos ellos en todo el mundo. Y teníamos un gran obstáculo, ¿Por qué iban a juntarse nuestros protagonistas si ya eran inmensamente ricos? ¿Por qué iban a atracar de nuevo? La clave tardó en llegar, pero apareció, sólo teníamos una excusa para unirlos de nuevo y era emocional: no se trata de dinero, sino de la familia. Porque eso, justo eso era lo que habían construido nuestros personajes, una familia que se protege y se cuida, que se quiere aunque, en ocasiones, se quieran matar. El Profesor reúne a su banda de nuevo porque han detenido a uno de los suyos, y si tocas a uno, los tocas a todos.

Asentados en las mismas bases de las dos primeras temporadas, arrancamos esta tercera con un plan de rodaje mucho más ambicioso que nos ha llevado a Tailandia Panamá o Italia. Eso sí, teniendo claro que seguiría siendo España el lugar en el que se desarrollaría la acción. También sabíamos que necesitábamos seguir contando con un personaje que despertaba pasiones enfrentadas como Berlín, pero lo habíamos matado. ¿Cómo resolver su regreso? Resucitarlo en un hospital no era creíble, así es que lo hemos resuelto con una fragmentación temporal mucho más complicada que en las anteriores temporadas, ahondamos en esta libertad para jugar con los tiempos, vamos un paso más allá.

Recuperamos para la banda a dos protagonistas que eran ajenas al grupo durante el asalto a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, como Raquel y Mónica, e introducimos nuevos personajes tan magnéticos, complejos y ambiguos como los que los precedieron, con unas importantes cargas emotivas y arcos de transformación singulares. Elegimos a Najwa Nimri, Hovik Keuchkerian y Rodrigo de la Serna como nuevas caras, seguros de que encajarían en una serie tan coral. Lo han logrado haciéndose con sus personajes y enriqueciéndolos tanto como Álvaro Morte o Pedro Alonso aportaron a los suyos cuando arrancamos con esta aventura. Los nuevos personajes tienen tal carga de ADN de La Casa de Papel que cuesta imaginarse que no estuvieron en las dos primeras temporadas.

Al magnífico trabajo que ha realizado el equipo de actores hay que sumar el del equipo de guion y el técnico, casi doscientas personas volcadas en sacar adelante una producción exigente y complicada. Un grupo de locos que ha dado fuerza al impulso que iniciamos Jesús Colmenar, Migue Amoedo, Cristina López Ferraz, Esther Martínez Lobato y yo hace casi tres años con una idea en la cabeza: juntar algunos géneros imposibles: Había una regla no escrita por la cual las películas de acción eran vacuas o superficiales. Y las películas intimistas o emocionales, parecían aburridas o indies en el imaginario colectivo. Así que juntamos esos dos géneros. Acción emocional con humor negro. Y llevamos un género, el de Atracos Perfectos pero con mirada femenina, a ficción seriada, que hasta ese momento no existía. Y en ese experimento de laboratorio encontramos nuestro particular retrato de La Resistencia.

La temporada 3 mantiene el ADN de las anteriores, pero es más en todos los sentidos. Más espectacular, más ambiciosa, más sorprendente, más bella fotográficamente, más arriesgada narrativamente y por supuesto seguimos en el laboratorio. La nueva serie que va a ver el espectador está superpuesta en cinco capas temporales que se suceden, como siempre, a un ritmo inclemente. Desde La Casa esperamos que el espectador las vea con el mismo entusiasmo y la misma épica con el que las hemos rodamos.

Más información

Dos años después de que el Profesor y los suyos vaciaran la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, la Banda disfruta por parejas de una placentera y multimillonaria existencia en distintos paraísos del planeta. Sin embargo, su tranquilidad va a irse al traste por culpa de un error de Río, que en cuestión de horas será capturado por la Policía. En el último momento, Tokio consigue escapar y pedir ayuda al Profesor. Sabiendo que esta detención pone en riesgo la seguridad del resto de la Banda, el Profesor no va a tener más remedio que reunirlos a todos de nuevo para organizar un segundo golpe que les permita poner en jaque al Estado y recuperar a Río.

Tokio, Nairobi, Denver, Helsinki y Estocolmo van a contar con la excepcional ayuda de la ex inspectora Raquel Murillo, que en este tiempo ha rehecho su vida familiar al lado del Profesor y está a punto de convertirse en un miembro más del equipo bajo el apodo de Lisboa. Además, el Profesor ha incorporado a tres nuevos fichajes: Palermo, un ingeniero excéntrico y vanidoso; Bogotá, un solitario y rudo soldador; y Marsella, eficaz y peligroso solucionador de problemas. Juntos intentarán realizar un golpe histórico: atracar el Banco de España.

A las dificultades de asaltar uno de los edificios mejor protegidos del mundo, se le añadirán pronto las tensiones que surgirán dentro del banco: atracciones peligrosas, rivalidades, traiciones, reencuentros incómodos y situaciones de máximo estrés que pondrán a prueba la fortaleza de sus relaciones personales. Por no hablar de los enemigos que les acecharán día y noche desde la carpa policial: el coronel Tamayo y la inspectora Sierra, dos huesos duros de roer que con tal de evitar una nueva humillación estatal no dudarán en saltarse la ley las veces que sea necesario.

La tercera parte de La Casa de Papel narra las fases de este plan de rescate imposible, incluyendo flashbacks que nos permitirán ahondar en la relación fraternal del Profesor y Berlín, así como descubrir qué pasó en las vidas de nuestros protagonistas durante los dos últimos años.