‘Cuéntame cómo pasó’, a lo largo de sus dos décadas en antena, se ha convertido en mucho más que una serie televisiva; se ha transformado en una crónica viviente de la historia y sociedad españolas, reflejada a través de la vida de la familia Alcántara.

La partida de la abuela Herminia, uno de los pilares emocionales de la serie, simbolizó el fin de una era. Su personaje, que abarcó prácticamente un siglo de historia, representó la memoria colectiva de varias generaciones.
Cada despedida de un personaje ha sido un reflejo no solo de los cambios en la trama, sino también de la evolución del propio país y de la industria del entretenimiento en España.
La interpretación de María Galiana fue tan emblemática que su despedida fue sentida profundamente no solo por los personajes de la serie, sino también por la audiencia que la había seguido durante años.
La salida de José Sancho, quien daba vida a don Pablo, también marcó un punto de inflexión en la serie. Su personaje fue crucial en el desarrollo de varios arcos narrativos y en la evolución del personaje de Antonio Alcántara. La muerte real de Sancho añadió una capa de tristeza y finalidad a la partida de su personaje.
La abuela Pura, por otro lado, representaba un contraste interesante con Herminia. Interpretada por Terele Pávez, Pura aportó una dinámica diferente a la familia Alcántara. Su muerte en la serie fue un momento emotivo que reflejó la pérdida de un talento actoral significativo en la vida real.
El personaje de Miguel Alcántara (Juan Echanove) fue también crucial en la narrativa de ‘Cuéntame cómo pasó’. La salida de Echanove, especialmente, fue un golpe para la serie, dada su relevancia en la historia y la controversia que rodeó su partida.
La serie también ha sabido manejar las despedidas de otros personajes importantes como Federico (Luis Cuenca), Desi (Roberto Cairo), Valentina (Alicia Hermida), Anselmo (Paco Sagarzazu) y Eugenio (Pere Ponce). Cada uno de estos personajes trajo consigo historias y emociones que enriquecieron la trama y dejaron una huella imborrable en la memoria de los espectadores.

Finalmente, la muerte ficticia de Antonio Alcántara, interpretado por Imanol Arias, y su continuación en la serie, simboliza la resistencia y la persistencia de la memoria, un tema recurrente en ‘Cuéntame cómo pasó’. La capacidad de la serie para entrelazar la ficción con la realidad, reflejando las complejidades de la vida y la historia, ha sido una de sus mayores fortalezas y clave de su éxito duradero.
En conjunto, ‘Cuéntame cómo pasó’ no solo ha sido un espejo de la sociedad española, sino también un testimonio del talento y la evolución de la industria televisiva en España. Cada despedida en la serie ha sido un homenaje a la vida, al arte y a la historia, resaltando el poder del entretenimiento para capturar y expresar la esencia de la experiencia humana.